Sumario
Freud y Lacan -hablados 3-
Freud y Lacan -hablados 4-
Criterios de salud y enfermedad. Proceso de enfermar, diagnóstico y tratamiento
Concepto de trabajo
Concepto de tiempo (I)
Concepto de tiempo (II)
Sobredeterminación y Causalidad (I)
Sobredeterminación y Causalidad (II)
Miguel Oscar Menassa
Sobre las relaciones de pareja
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MEDICINA PSICOSOMÁTICA

Viene de Extensión Universitaria nº 142

CRITERIOS DE SALUD Y ENFERMEDAD. PROCESO DE ENFERMAR. DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO

SALUD COMO PRODUCCIÓN

Concepto de trabajo
El trabajo tiene como efecto la producción de algo que no existía previamente, algo nuevo, rompe con la idea de inmediatez, de evidencia, porque no se trata de lo vivido. Desde Hegel el concepto de experiencia ya no tiene que ver con lo vivido, con lo acontecido, sino que experiencia es experiencia del lenguaje, del concepto.

En psicoanálisis el sujeto no está dado, todo en él se construye. Si lo pensamos con el concepto de trabajo, el sujeto psíquico es una construcción o producción en análisis.
Para estudiar el concepto de trabajo tomamos como texto de referencia La intepretación de los sueños porque es el texto que funda el campo psicoanalítico, en tanto es donde se produce el concepto de inconsciente.

Los factores que intervienen en el proceso de trabajo son:

-Un objeto o materia sobre la que se va a trabajar. Materia prima que sería una materia ya trabajada, es decir un objeto sobre el que se ha realizado un trabajo previo.

-Los medios o instrumentos: todo aquello existente entre el trabajador y el objeto que se trabaja y que sirve para encauzar la actividad sobre ese objeto.

-Por último, estaría el producto-efecto del trabajo.

Es decir que en el proceso de trabajo, la actividad del hombre, del trabajador, consigue, valiéndose de los instrumentos correspondientes, transformar el objeto con arreglo a un fin. Por tanto, en este proceso de trabajo, estaría incluido el proyecto de trabajo, pensamiento puesto en acto, pensamiento concreto.

En La interpretación de los sueños podemos leer tres tipos de trabajo:

-Un trabajo teórico, que da cuenta de cómo se produce la ruptura y cuyo producto-efecto es la Teoría del Inconsciente. Su objeto es un objeto teórico: concepto de inconsciente.

-Una vez producida la Teoría del Inconsciente, habría un segundo trabajo, que sería el trabajo práctico-técnico donde lo que se produce es autoconocimiento y autotransformación del psicoanalizante. Su objeto es un objeto real: el inconsciente de ese paciente en análisis.

-Un tercer trabajo, el trabajo real del sueño o trabajo real del inconsciente, que se podría pensar que está desde el comienzo, pero que en psicoanálisis se produce al final, como construcción teórica. Su objeto es un objeto aparente: el discurso onírico o discurso del paciente.

El trabajo teórico, cuya materia prima es el discurso onírico o discurso del paciente, va a operar sobre éste con instrumentos teóricos: principio de constancia, concepto de aparato psíquico y la noción filosófica de latente y manifiesto. Su resultado es la producción del concepto de Insconsciente, objeto de conocimiento de la teoría psicoanalítica.

Al tomar como materia prima el discurso del paciente Freud plantea un nuevo nivel de objetividad. A diferencia de las ciencias de causa, el psicoanálisis parte del efecto, del último producto del funcionamiento del aparato. El sueño es el relato del sueño, la realidad para el sujeto es lo que dice de ella, es una realidad significante, pasada por la palabra.

Una vez producido el objeto teórico tendríamos el segundo trabajo, técnico práctico. Éste tiene como materia prima el discurso del psicoanalizante y como instrumentos la teoría, el método y la técnica psicoanalítica en un complejo articulado con el saber inconsciente del analista. El efecto será, mediando el trabajo del paciente, la autotransformación y el autoconocimiento del mismo.

Esto supone que habría un trabajo por parte del analista y otro trabajo por parte del paciente.


Dibujo original de Miguel Oscar Menassa (D3097)


Dibujo original de Miguel Oscar Menassa (D3095)

Por último tendríamos el trabajo real del sueño que habíamos señalado que era una construcción teórica. El trabajo del método psicoanalítico sobre el discurso onírico es el que hace que el sueño tenga sentido. No se parte del deseo inconsciente, no recaen sobre él los mecanismos de condensación y desplazamiento, escenificación y simbolización para llegar al sueño manifiesto, sino que se parte del sueño manifiesto, se produce la interpretación, se reconstruyen operaciones y se da cuenta de la estructura determinante. Ahora por medio de la construcción teórica puedo decir que hubo un deseo inconsciente.

La enfermedad, el síntoma, sería el objeto aparente, contenido manifiesto sobre el que habrá que realizar un trabajo. El objeto teórico es el concepto de inconsciente, se lee desde la teoría del inconsciente, la teoría permite una escucha psicoanalítica. El objeto real sería el inconsciente de un paciente en concreto, el despliegue de ese sujeto en análisis, es sólo desde ahí desde donde se puede leer la estructura (posición del sujeto).

Tendremos que pensar que para un síntoma cualquiera, para una enfermedad cualquiera, el trabajo de interpretación es el que va a construir el diagnóstico. En el trabajo analítico el paciente se nos muestra como sostenido por una estructura psicosomática, histérica..., sólo después sabremos de lo que se trata. Si el sueño en sí no tiene ningún sentido, si es el trabajo del método psicoanalítico el que hace que el sueño tenga sentido, lo mismo sucede con el síntoma neurótico o con la enfermedad psicosomática. En psicoanálisis no podemos concluir que un paciente es psicosomático porque presente una de las enfermedades que la medicina considera como tales: úlcera, asma, etc. Saber de la estructura que sustenta el síntoma sólo es posible después del trabajo de interpretación.

Si el trabajo es categoría central en psicoanálisis tendríamos que pensar que enfermar es un trabajo y mantener la enfermedad otro. Pensar por tanto la enfermedad, tanto psíquica como la orgánica o la psicosomática, no como algo azaroso, sino como producto-efecto de un trabajo. Trabajo que está condicionado por sus leyes, así cuando hablamos del trabajo del inconsciente estamos diciendo condensación, desplazamiento, puesta en escena y elaboración secundaria, elementos u operadores que siempre van a estar en juego. Freud nos va a mostrar cómo en la producción del síntoma o en la producción del delirio participan estos elementos de los que hablamos, enfermar también es un trabajo, un proceso.

Recordemos que tomamos las neurosis actuales en relación con la psicosomática. Cuando Freud habla de la neurosis de angustia señala que no existe mecanismo psíquico, es decir, que no existe condensación, desplazamiento... como en la producción de los síntomas histéricos, por tanto, tendremos que pensar de qué trabajo se trata en la enfermedad psicosomática.

El trabajo que se debe realizar para mantenerse en una estructura psicosomática es muy costoso desde el punto de vista de la economía pulsional, en tanto el paciente paga el diezmo de la lesión orgánica y todas las mutilaciones de su vida que tal enfermedad conlleva. Este trabajo tendría que ver con organizarlo todo para negar que se es un sujeto psíquico, que se padece de procesos psíquicos, para pretender el imposible de reducir el cuerpo a lo biológico.

Concepto de tiempo
El concepto de tiempo que maneja el psicoanálisis es el après-coup, el futuro anterior, la recurrencia. Cuando Freud dice que el inconsciente no tiene tiempo, hace referencia al tiempo cronológico, al tiempo del reloj, lo que vamos a llamar tiempo real. Por tanto, tendríamos dos conceptos de tiempo diferentes: el tiempo del inconsciente, el que maneja el psicoanálisis, un tiempo discontinuo, y el tiempo aristotélico, real, continuo. Ambos no son excluyentes, el nuevo concepto de tiempo analítico no elimina el tiempo cronológico, sino que lo tiene en cuenta.

El concepto de après-coup va a permitir introducir cuestiones fundamentales acerca del diagnóstico, el pronóstico y el tratamiento y nos permitirá pensar el problema del tiempo en la estructura psicosomática.

Para el psicoanálisis el sujeto no está fuera del tiempo, como lo estaría si concebimos un tiempo aristotélico, donde lo único que puede hacer el sujeto con el tiempo es contarlo, mensurarlo. Es éste un tiempo como transcurso que va desde el pasado, pasa por el presente y se dirige hacia el futuro.

En el tiempo del inconsciente la determinación no viene del pasado, viene del futuro, el tiempo del inconsciente es con pulsión de muerte. Cuando decimos que la determinación viene del futuro nos referimos a que lo que determina son las frases siguientes, los próximos pasos, y no las frases ya pronunciadas o los pasos ya dados.

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